San Juan María Vianney: 4 de agosto ft. P. Armando Vargas

San Juan María Vianney, durante más de cuarenta años, se entregó de una manera admirable al servicio de la parroquia que le fue encomendada en la aldea de Ars, cerca de Belley, en Francia, con una intensa predicación, oración y ejemplos de penitencia. Diariamente catequizaba a niños y adultos, reconciliaba a los arrepentidos y con su ardiente caridad, alimentada en la fuente de la Eucaristía, brilló de tal modo, que difundió sus consejos a lo largo y a lo ancho de toda Europa y con su sabiduría llevó a Dios a muchísimas almas. Es patrono de los párrocos y sacerdotes y nos enseña que la santidad no depende de tener muchas cualidad o saber mucho, sino de amar mucho.