Conferencia, " educación en desobediencia".

Como es el capítulo 111, creo que nos merecemos todos un programa especial en abierto. La idea la desarrolle en vacaciones tumbado en la playa, mientras iba tejiendo hilos argumetativos con la imaginación. Creo firmemente que la flexibilidad afectiva en la educación y en el modo en que nos comunicamos con las nuevas generaciones, basándonos principalmente en la negociación y en llegar a acuerdos desde la autoridad, lo cual nos reserva la posibilidad de imponernos en un momento determinado, ( puesto que relacionarnos con niños de igual a igual es una absurdez ideologizada de dimensiones apocalípticas) y dejando espacio para ceder de vez en cuando, pueda ser una de las claves de crear un mundo mejor, diferente y más razonablemente civilizado. Comenzamos la conferencia hablando del nazi que creo fuerte controversia , por las consideraciones que hizo Hanna Arendt ( de la que nadie me hablo ni en el colegio ni en la universidad) al respecto de su comportamiento y los motivos subyacentes, lo cual generó tremenda controversia, por salirse de lo políticamente correcto según el espíritu cultural del momento. No justificaba su comportamiento, pero parecía intentar entenderlo en sus esforzados intentos por comprender la génesis de la maldad en nuestras civilizaciones. La psicología en aquel entonces, tenía pocos complejos y mucha libertad, y tuvo el enorme valor de dar evidencia empírica a la lógica de Hanna Arendt, que sencillamente, añadiendo unas gotas de cinismo a sus elaboradas argumentaciones , dio en el clavo. Los experimentos de psicología social, corroboraron tesis maquiavélicas que ya gozaban de 500 años de antiguiedad, y que sacudían un inmenso sopapo al narcisismo idealista humano, donde reposaban muy positivas consideraciones al respecto de nuestra naturaleza pura, inmaculada, libre, consciente e inalterable en sus valores esenciales. Para finalizar, dejo unas consideraciones mías personales al respecto, tanto al respecto del entendimiento de porque nos callamos cuando todos dicen una bobada, o la corroboramos; porqué obedecemos a la autoridad de un modo ciego y sumiso, o porqué sentirnos con legitimidad ideológica y apoyo institucional, puede llevar a casi cualquiera de nosotros a cometer atrocidades que jamás pensaríamos que cometeríamos. También hago alguna consideración al respceto de cómo podríamos mejorar al respecto. Espero lo disfruten, aprendan algo, o al menos les sirva como materia de reflexion- Un abrazo y gracias a todos los fans que ya apoyan el programa, lo cual a buen seguro ayudará a continuar con más fuerza.